martes, mayo 22, 2007

A veces quisiera simplemente quedarme callada

No preguntar, no contestar, quedarme con mis dudas y mis respuestas, a final de cuentas no me interesa saber mas o menos de lo necesario, y así he manejado mi vida casi siempre y me he ahorrado muchos problemas... aprendí la lección de una manera injusta quizá, pero sirvió para poner limites a lo que conozco y doy a conocer.

Nadie requiere saber todo sobre mi, ni quisiera yo, aun así nunca me he negado a contestar preguntas razonadas y con objeto, no me hace daño que la gente sepa mas o menos de mi, siempre y cuando la información sea de mi propia boca y no acostumbro mentir sobre eso.

A pesar de todo, cuando me niego a compartir cosas no es por que sean el mayor secreto del universo, es simplemente por que es algo que no quiero contar, que quizá salga en otra conversación circunstancial o le pueda comentar a la persona que lava el carro o a alguien que me encuentro en el camión y no pasa nada, el mundo no se acaba, pero cuando lo preguntan directamente simplemente no lo quiero decir, y ya.

Tampoco soy alguien que haga muchas preguntas, al contrario, acostumbro conocer a la gente por lo que me dice y por lo que no me dice, no me gusta descubrir mentiras es por eso que no pregunto cosas en las que me puedan responder con falsedad. No necesito conocer mucho a la gente, es mas, temo conocer demasiado a las personas, no me agrada, me siento intimidada cuando se mucho sobre alguien, me da miedo y me alejo, así soy.

Prefiero descubrir cosas con el paso del tiempo y tener siempre alguna duda, alguna curiosidad, no me mata no saber algo, es por eso que no insisto cuando no me quieren contar lo que pasa o lo que le sucede a alguien... ya lo contaran cuando sea necesario o cuando sientan la confianza de hacerlo.

Me gusta tener dudas acerca de la gente, aunque hay veces en las que desde el primer momento se todo lo que tengo que saber y tomo la decisión de conocer mas o ignorar.

No te pregunto por que no me gusta que me pregunten, pero si lo haces, no me importa contestar, solo que recibirás la respuesta bajo tu propio riesgo.

lunes, mayo 14, 2007

Del treinta al uno

Treinta, la edad perfecta
veintinueve, días del mes bisiesto en que te fuiste
veintiocho, meses tirados al olvido
veintisiete, veintisiete lunares en mi cuerpo
veintiséis, palabras tristes
veinticinco, 25 pesos por un capuchino
veinticuatro, libros ya leídos
veintitrés, números en mi agenda
veintidós, correos sin contestar
veintiuno, veintiún años intentándolo
veinte, segundos de castigo
diecinueve, cicatrices en el alma
dieciocho, monedas de 1 centavo en mi alcancía
diecisiete, navidades a solas
dieciséis, perdidas irreparables
quince, días sin ti
catorce, recuerdos en mi almohada
trece, sueños premonitorios
doce, suspiros diarios
once, llamadas perdidas
diez, millas por día
nueve, horas de encierro
ocho, verdades escondidas
siete, intentos fallidos
seis, cervezas por semana
cinco, cobijas que no quitan el frío
cuatro cigarros permitidos
tres, tristes tigres
dos, personas
uno, uno mismo para amarse, beberse, gozarse, sentirse, fumarse, cobijarse, encerrarse, tenerse, soñarse, suspirarse, besarse... vivirse.
Esta mañana alguien dijo "aquí estoy" antes que yo, alguien encontró tu mirada antes que yo alguien convirtió el sol en un sueño; alguien escarbo en mi historia y encontró un te quiero.
Hoy a media tarde hallé al sujeto, ese que me robo las sonrisas y me dejo el anhelo; el que convirtió los suspiros en sollozos y las alegrías en demonios.
Hoy me di cuenta que estoy aquí y que soy yo quien lo dice; que las heridas en la memoria ya no existen y que las cicatrices se curaron.
Que la luz de la mañana al fin entra a mi cuarto. Y resulta tan extraño decirlo... pero el exorcismo se ha terminado, los fantasmas me han abandonado y ahora camino sobre una ruta limpia y un poco más segura.
Quien sabe cuanto tiempo pueda mantenerme tan segura, pero esta claro que aprovechare mientras la lanza este apuntando hacia otro lado. Tal vez dos años han servido de mucho, quizás mis sueños rotos se estén reconstruyendo y mis frustraciones ya se han hecho trizas.
Ayer, media hora más tarde, solo era yo tratando de salir del abismo, hoy te puedo decir, que solo soy yo.

lunes, mayo 07, 2007

SEGUNDAS OPORTUNIDADES

Y es que es difícil decirlo, pero lo cierto es que me equivoque, no se en que, ni en que magnitud, pero si quisiera saberlo, ¿por que? por que casi nunca me arrepiento de las cosas que hago, soy de esas personas que toman decisiones intempestivas y que a la larga resultan ser las mejores, pero en esta ocasión la regué, si, lo admito, aunque creo que fue por que la pensé demasiado, si, creo que ese fue el error, lo pensé mucho y me di tiempo de encontrar excusas y defectos sin fijarme en lo que de verdad importaba.
No suelo pedir perdón, disculpas si, pero perdón... te pido perdón esta vez, no por lo que hice, mas bien por que me equivoque y tu no tienes la culpa de mis errores.
Tal vez soy demasiado inmadura para tomar mis decisiones, tal vez deba dejar de hacerlo y permitir que alguien mas lo haga por mi, y de paso que viva mi vida también, así me ahorro la molestia (--vez, ya me enoje--)
Como dice por ahí Horacio Quiroja en su decálogo del perfecto cuentista "No escribas bajo el imperio de la emoción. Déjala morir, y evócala luego. Si eres capaz entonces de revivirla tal cual fue, has llegado en arte a la mitad del camino" así que creo que lo que ahora quisiera decirte lo dejare enfriar un poco, y ya con la mente un poco mas despejada te lo diré como debe de ser, quizá en otro post, quizá junto al oído, quizá en otro momento.

jueves, mayo 03, 2007

Se que no soy la mujer mas transparente del mundo, al contrario, guardo la mayoría de mis sentimientos bajo una mirada polarizada, unos labios cerrados, un rostro inexpresivo.
Se que es muy difícil entenderme, incluso yo misma no me entiendo la mayoría de las veces, de ahí que no pretenda que alguien mas lo haga por mi.
A pesar de mi discapacidad emocional y de mi ser ermitaño, me consideraba una mujer honesta y sincera, pero ahora me he dado cuenta que tal vez no sea así.
Siempre he considerado la verdad como la mejor opción para vivir mi vida y no interferir en la de los demás, siempre dije que no me agradaban las mentiras y evitaba a toda costa utilizarlas pero poco a poco fui cayendo en cuenta de que siempre lo hacia, siempre mentía... cuando salía de la ducha y me arreglaba para ir a trabajar saludándome hipócritamente en el espejo, cuando amablemente le cedía el paso a un peatón gritando en silencio que se apresurara por que llevaba prisa, cuando me sentaba a descansar después de una larga jornada y me decía a mi misma que todo iba bien. Puras mentiras.
Podía ser completamente sincera y honesta con los demás pero imposible serlo conmigo misma.
Cuando me encerraba en mi ser egoísta y me consolaba a mi misma diciendo que yo podía ser feliz conmigo misma, sin necesitar de algo o alguien mas, cuando con lagrimas me suplicaba compasión y me pedía a gritos que dejara de ser tan negativa.
Las mentiras suelen ser una solución momentánea para pequeños problemas pero con el paso del tiempo se convierten en un castigo permanente, la verdad puede no ser la manera mas amable de enfrentar algo, pero una mentira dicha a si mismo puede desencadenar mucho mas que un episodio de angustia, por que a final de cuentas uno termina creyéndosela y cuando la verdad cae de golpe y de manera inesperada todo parece acabar mucho mas rápido.