jueves, febrero 01, 2007

"Me aleje tanto de ti que ya no se como regresar" me parece tan absurdo y a la vez tan cierto, el hecho de que la distancia no sea simplemente física, si no también emocional, que los kilómetros se conviertan en olvido y la memoria la única manera de transportarse.
¿Como puede alguien alejarse tanto en tan poco tiempo?, ¿como puede una persona olvidarse de otra si la tiene al lado?, no lo entiendo, mas intento comprenderlo, quizás es por que nunca he podido olvidarme de alguien, todas y cada una de las personas que han pasado por mis casi 22 años siguen repartidos en mi memoria, algunas mas escondidas que otras, eso si, pero todas están ahí, de una u otra manera, mas yo, yo no se donde estoy, si mi vida es solo un recuerdo en la mente de alguien o en el olvido de otros, si estoy oculta entre pensamientos o si soy intrusa en el sueño de alguien, si salgo a la luz una noche mientras alguien piensa en sus vivencias de la infancia, o en el reventón de la semana pasada.
Las personas olvidan, pero creo que eso no es sinónimo de ausencia, al final de cuentas el olvido es una distancia que se termina en algún momento, cuando se encuentra el camino, quizás largo, pero no infinito, la cuestión es si vale la pena recorrerlo.
Tengo ya tres o cuatro días pensando en que hacer con el tiempo que me sobra, ya no tengo necesidad de acostarme tarde, mas sin embargo sigo sin poder dormir por las noches, creo que mi falta de actividad física me esta generando mas cansancio del normal, trabajo, quizás un poco mas de lo que debería, pero eso no es lo que me agota, quisiera aprender a hacer algo nuevo, ya aprendí a hacer café, ahora quisiera aprender a tocar la guitarra o aprender francés -eso me fascinaría- pero se que en estos momentos debo comenzar a actuar por prioridades y aunque parezca el colmo, yo no estoy dentro de mis prioridades.
Quiero volver a escapar de la ciudad y de todo lo que le atañe, quiero aprender a surfea o a pescar o a manejar un velero, no se... Por lo menos quiero aprender a caminar por las calles sin sentirme prisionera de asfalto, sin sentir el peso de la responsabilidad sobre mis hombros, yo se que ya paso mi época de rebelde, no por naturaleza, mas bien por que yo quise, se que lo que tengo yo misma lo he buscado y conseguido y al mismo tiempo me siento orgullosa de ello, aunque por otro lado siento que estoy dejando mi yo rebelde detrás de puertas cada vez mas difíciles de abrir, y tal vez estoy comenzando a refuta el dicho que dice "querer es poder" por que aunque quiero miles de cosas, no he podido hacer la mayoría de ellas.
Tal vez hoy me acueste con la intención de terminar con este asunto, pensare toda la noche hasta encontrarle una solución, seguro antes de que pase eso, me quedare dormida.