viernes, abril 21, 2006

Y no es que no quiera volar, es que mis alas se están deshaciendo pluma por pluma.
No es que quiera quedarme, pero mis pies siguen clavados al mismo suelo de hace años.
No es que te tenga miedo, es que recuerdo cada vez que te veo.
Y, lo juro, no es que no quiera volver a amar… es que mi alma esta cansada de llorar.

martes, abril 18, 2006

La cuerda esta a punto de reventar, el hilo se hace cada vez más delgado y al igual que mi paciencia, su resistencia se acaba.
Ya no se que decir ni que hacer. Se que toda esta suerte será cobrada algún día y sospecho que no será de una manera muy agradable.
No se si es que soy una cobarde, o simplemente la vida me esta recordando que las tiene de todas, todas.
No soy y quizás nunca sea la persona que quiero ser; no tengo suficiente voluntad y estos últimos días han estado de la jodida.
Tengo un pinche coraje que no puedo tragarme ni desquitar, esta atorado ahogando mis sueños y dificultándome la respiración.
Tengo tantas ganas de largarme de aquí y parece que con mayor razón me ato más a este maldito exilio.
No se cuanto tiempo falta para que el hilo termine de romperse, lo único que espero por ahora es no hacerle mas daño a nadie.

lunes, abril 10, 2006

Mírame

¿Crees que sabes quien soy?

¿Sabes que pienso cada noche?

¿Que veo en mis sueños?

¿A que huele mi almohada, mis ropas, mi alma?

¿Sabes en realidad si es en mí en quien piensas?

Yo no soy... no soy todo lo que crees, ni creerías todo lo que soy.

Yo no soy la de ayer, quizás ni siquiera la de hoy.

Yo soy el viento que sopla en la mañana, yo soy la huella que dejan tus pasos, yo soy la sombra que te cubre el sol y los rayos que evaporan el mar.

Yo soy todas esas cosas insignificantes que nunca vez pero que siempre están ahí.

sábado, abril 08, 2006


Bueno, esto ya es el colmo, ya me canse de mi maldita falta de voluntad sumada a la desidia y al calorcito de las cinco cobijas que me cubren cada noche. Ni siquiera las tres alarmas simultáneas esparcidas por todo el cuarto han logrado que me levante a tiempo y llegué temprano al trabajo.
Definitivamente la puntualidad no es mi fuerte, y es la puntualidad, por que si me dicen a las 8, llego a las 7 o a las 9, sin me dicen a las 12 llego a las 2 de la tarde, creo que esto ya no tiene remedio ¿alguien sabe alguna manera de hacer la puntualidad algo cotidiano? por que creo que yo, ya agote todos mis recursos.